Israel Bombardea Escuela de Naciones Unidas en Gaza: Al Menos Treinta Muertos
El Gobierno de Netanyahu asegura que era un complejo de Hamás. La UNRWA condena el hecho.
Israel bombardeó una escuela de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) en Gaza, provocando la muerte de al menos treinta personas. El Gobierno de Netanyahu justificó el ataque alegando que allí funcionaba un complejo de la organización extremista palestina Hamás. La UNRWA condenó enérgicamente el ataque.
En un ataque aéreo llevado a cabo por Israel, una escuela de la UNRWA en Nuseirat, en el centro de Gaza, fue destruida, dejando un saldo de al menos treinta muertos. El Gobierno de Israel afirmó que el edificio era utilizado por Hamás como un complejo operativo y que el ataque eliminó a combatientes implicados en el ataque del 7 de octubre, que desencadenó la actual guerra.
Ismail al-Zawabta, director de la oficina de medios de comunicación del Gobierno de Hamás, negó categóricamente las afirmaciones israelíes, calificándolas de mentiras para justificar "el brutal crimen contra decenas de desplazados". Según al-Zawabta, la escuela no albergaba ninguna actividad militar.
El Ejército israelí sostuvo que se tomaron medidas previas al ataque para minimizar el riesgo a civiles, aunque no precisó si hubo víctimas no combatientes. Tras el ataque, la directora de comunicaciones de la UNRWA, Juliette Touma, declaró que la cifra de muertos oscilaba entre 35 y 45, sin poder confirmar aún el número exacto de víctimas.
La ofensiva ocurrió en el marco de una nueva campaña militar israelí en el centro de Gaza. El portavoz militar israelí, el teniente coronel Peter Lerner, indicó que había entre 20 y 30 combatientes en la escuela, muchos de los cuales murieron en el ataque. No se pudo confirmar si hubo bajas civiles.
Mientras tanto, Hamás ha exigido el fin permanente de la guerra y la retirada israelí como condiciones para cualquier alto el fuego. Ismail Haniye, líder de Hamás, manifestó que la resistencia considerará seriamente cualquier acuerdo basado en el fin completo de la agresión y el intercambio de prisioneros, una postura que contrasta con la propuesta de tregua anunciada por el presidente estadounidense Joe Biden.
Desde noviembre, todos los intentos de alto el fuego han fracasado, con Hamás insistiendo en el fin definitivo del conflicto e Israel dispuesto a negociar solo pausas temporales hasta derrotar a la organización armada. Washington continúa presionando para alcanzar un acuerdo, con el director de la CIA, William Burns, reuniéndose en Doha con mediadores de Qatar y Egipto.
El conflicto, que comenzó el 7 de octubre con un ataque de Hamás que dejó 1.200 muertos y más de 250 rehenes en Israel, ha causado más de 36.000 muertes en Gaza, según autoridades sanitarias locales. El conflicto con Hezbolá en el Líbano también amenaza con intensificarse.
A pesar de la presión internacional, el gobierno de Netanyahu ha mostrado tibieza hacia la propuesta de alto el fuego de Biden, mientras que sus miembros de extrema derecha y centristas amenazan con abandonar el gabinete si se llega a un acuerdo que deje en pie a Hamás. El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, afirmó que cualquier negociación se llevará a cabo "bajo el fuego".
En medio de la violencia, dos niños y su madre fueron velados en el Hospital de los Mártires de al-Aqsa, destacando el alto costo humano del conflicto. "Esto no es una guerra, es una destrucción que no se puede expresar con palabras", lamentó el padre de los niños fallecidos.