ELECCIONES ESTADOS UNIDOS: Trump vs. Harris: una contienda polarizada que pone en juego el futuro de Estados Unidos
La vicepresidenta ya votó por correo y el exmandatario lo hará este martes. La economía, la inmigración y los derechos de las mujeres son los temas clave que dividen al país en esta contienda electoral.
Con una fuerte carga de polarización y expectativas, Estados Unidos se prepara para una elección presidencial que enfrenta a Donald Trump y Kamala Harris, quienes representan visiones opuestas en los temas más sensibles para la ciudadanía. La jornada electoral de este martes convocará a cerca de 240 millones de votantes, en medio de un clima de tensión en el que economía, derechos sociales e inmigración encabezan la agenda.
Choque de posturas y apoyo demográfico diverso
Kamala Harris, actual vicepresidenta y candidata demócrata, ha basado su campaña en el fortalecimiento de derechos sociales, en especial los vinculados a la seguridad social y los derechos reproductivos. Según los testimonios, estos temas han sido fundamentales para atraer el voto femenino, que se inclina ampliamente por su candidatura. Harris promete defender las libertades individuales, planteando que las mujeres tengan autonomía sobre sus cuerpos y decisiones personales, un punto de gran contraste frente a su rival.
Por su parte, Donald Trump, con un mensaje enfocado en una "economía fuerte" y el control de la inmigración, capta la atención del voto conservador y del electorado masculino, así como de minorías que suelen inclinarse por los demócratas. En Florida, por ejemplo, inmigrantes latinos, especialmente cubanos y venezolanos, respaldan al republicano debido a su discurso sobre la seguridad y el cierre de fronteras, una paradoja que marca la jornada.
La brecha de género y el “voto vergonzante” en la contienda
La brecha de género es una de las características más notables en esta elección, con un respaldo mayoritario hacia Harris por parte de mujeres y una inclinación masculina hacia Trump. Además, se ha detectado un fenómeno de "voto vergonzante" en estados como Florida, donde algunos votantes que no se manifiestan públicamente a favor del republicano, en privado han expresado su apoyo. Esta complejidad agrega incertidumbre y promete mantener la expectativa hasta el último conteo de votos.